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“La verdad es que cada vez estábamos más convencidos VICTOR HUGO: Y nos pusimos a mirar
alquileres de cámaras.
de que íbamos a hacer algo “grande”. (Víctor Hugo)
DM: Así que alquilásteis todo el equi-
preguntarnos por el proyecto, y a decirnos po para rodar la película.
VICTOR HUGO: Básicamente todos ellos que contáramos con ellos...
nos decían “¡tíooooo... QUIERO VER ESTA MARÍN: No exactamente.
PELI!” MARÍN: O sea, que teníamos una buena
historia, las coreografías de acción las NACHO: Como te decía... “se nos fue la
MARÍN: Y si, se “nos fue la olla”. íbamos a hacer nosotros, o sea que iban a olla”. Al final acabamos comprando no
ser.... ¡LA HOSTIA! y además teníamos acto- una, sino ¡DOS! cámaras... y contratamos a
NACHO: ¡Pero no de golpe! Todo fue res profesionales con nombre implicados en unos chicos de sonido, para poder tener un
surgiendo de una manera muy natural y el proyecto... sonido profesional.
progresiva. Teníamos claro que teníamos
una buena historia, asíque lanzamos un VICTOR HUGO: ... y pensamos que quizás VICTOR HUGO: La verdad es que cada vez
cowdfunding en las Redes Sociales, pero la diferencia entre que nos cogiera Netflix estábamos más convencidos de que íbamos
que más que para pedir dinero, fue como o alguna otra plataforma la peli, podía ser a hacer algo “grande”, como dice Marín.
una “declaración de intenciones”. Nos ha- simplemente la calidad de las imágenes o
bíamos expuesto públicamente, y además del sonido. DM: ¿En qué momento os dáis cuen-
pidiendo dinero y colaboración... ¡y la gente ta de ello?
comenzó a unirse! Lo cual era un compro- MARÍN: A ver, el esfuerzo de reunir a la
miso que nos “obligaba” a seguir adelante. gente, ensayar, rodar, etc... iba a ser el mis- NACHO: Fue todo muy poquito a poco,
Y además, varios amiguetes con cierto mo tanto si rodábamos con moviles, como comenzamos con los ensayos, y fuimos-
renombre en la profesión, comenzaron a si rodábamos con cámaras “buenas”. preparando la primera sesión de rodaje...
entramos en el ROOMPRIDE (el hostal de
mi amigo Manu, en Chueca), que recon-
vertimos en “Puticlub”, y con el tema del
toque de queda, no pudimos salir hasta el
día siguiente.
MARÍN: Y allí todos metidos, con las
mascarillas, el gel, la distancia (cuando se
podía) y todo ese rollo...
VICTOR HUGO: Y rodando a contrarreloj.
No teníamos “combo” (la pantalla donde el
director chequea el resultado), y además el
director era uno de los actores... y además
la cámara era nueva, con lo que íbamos un
poco a ciegas, cuando podíamos revisá-
bamos las tomas, y cuando yo le de´cia a
nacho que “creía que era buena”, se fiaba y
tirábamos para adelante.

NACHO: Pero la verdad, es que hasta que
no llegué a casa ese día, y volqué todo lo
rodado en el ordenador y pude chequear-
lo... estabamos CA-GA-DOS.
En seguida les llame y les dije “chicos...
tenemos algo MUY BUENO entre manos”. Y
creo que ahí fue donde nos flipamos. Jajaja

DM: Marín, has destacado con mucha
convicción el tema de las coreografías
de peleas, háblame de ellas.
MARÍN: Bueno, parafraseándome a mi
mismo en la peli -en una escena eliminada,
por cierto, “¡llevábamos toda la vida prepa-
rándolos para esto!”.
Imagínate, más de 20 años haciendo co-
reografías de peleas contra varios adver-
sarios para nuestras exhibiciones de artes
marciales, toda la vida viendo cine...
¡Es que me salen solas! Se me ocurren mil
posibilidades. Y Nacho que dibujaba cómics,
y Víctor Hugo que estudió producción au-
diovisual y fotografía... yo hago las coreos,
y ellos tienen una visión brutal de donde
poner la cápara para que se vea mejor y la
pelea continúe contando la historia. Porque
una pelea no es dar goples porque si, es

14 Mayo/Junio 2023